Blanco y negro

Los retos de la lectura en un mundo digital

Dentro de los nada honrosos sitios que ocupa México en algunas mediciones internacionales, estamos entre los últimos lugares de libros leídos en promedio por habitante, aunque también andamos muy mal en niveles de comprensión. Es decir: leemos poco y mal.

Aunque los orígenes de este problema son multifactoriales, problema de naturaleza compleja como todos los que atañen al entramado social, es un hecho que este fenómeno no es nuevo y sólo el tiempo dirá si el acceso a internet lo agravará, lo matizará o lo combatirá.

Me detengo en este aspecto porque hay una discusión muy interesante al respecto.

De un lado están quienes sostienen que la lectura asociada al hipervínculo que trae consigo internet, está propiciando una cultura de la fragmentación. Y si de por sí leemos poco y mal, con estos recursos los niveles de comprensión estarían acotándose todavía más. 

Pero en el otro extremo hay quienes piensan que la red está fomentando una nueva forma de apropiación del conocimiento mucho más integral. 

Por último, debo comentar que llama la atención que uno de los anuncios para motivar los veinte minutos de lectura diaria, que además me parecen muy pocos, esté pensado en los personajes de la serie televisiva Don Gato. ¿Por qué tiene que partir de personajes de televisión y de una serie no precisamente identificada con las generaciones de hoy, una campaña que invite a la lectura? ¿No había otras opciones mejores? Son preguntas que simplemente lanzo al aire.

 

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