De acuerdo a varios indicadores, Cuba es un país que tiene un alto índice de escolaridad promedio. Cuenta con los mejores especialistas en varias ramas como la biomédica y la agropecuaria y tiene un sistema hospitalario al que incluso van a atenderse personas de varias partes del mundo. Una de las escenas del filme Psico de Michael Moore es cuando un grupo de “balseros norteamericanos” se van a la isla a atenderse algunos problemas de salud, cuando descubren cuanto les cuesta atenderse en Cuba y establecen comparaciones con respecto a las exorbitantes sumas que gastan en su país, se declaran alta y gratamente sorprendidos.
Esta larga introducción tiene un contexto: La necesidad de distribuir libros de texto, especializados y manuales producidos en la isla. Es decir, para que este despunte científico y tecnológico tenga resultados concretos y para que en una isla cercada por el comercio global, exista un alto grado de desarrollo también técnico, los libros son importantes.
En este programa fuimos testigos de cómo se hacen los libros de texto y algunos libros universitarios, parece ser un hecho que se producen libros bien pensados en función de los planes de estudio y en función del alto grado de especialidad que tienen los científicos caribeños; me parece pertinente dejar en el aire una pregunta ¿por qué no se conocen esos materiales en México? Tengo tres posibles respuestas, puede haber otras o una combinación de muchas, porque el problema del bloqueo les dificulta la exportación, porque la situación de los libros de texto y científicos en manos del estado es terriblemente más burocrática y perversa de la que reconozcamos existe en México o porque simplemente a México le queda el interés de importar puros y ron de la isla.