El trabajo realizado por Laura Nieto a favor de la literatura infantil y juvenil es interesante porque está vinculado a una serie de personajes creados por ella y que le han acompañado a lo largo de las historias que ella misma escribe e ilustra. Si uno echa un vistazo en Amazon o en otros lugares de la red, se sentiría una gran simpatía por estos personajes que parecen amables, fue curioso escuchar la experiencia de vida de esta autora que de niña se ponía a discutir con sus padres, por qué en los cuentos de hadas no había teléfonos, ni trenes, ni luz, ni aviones, yo creo que una gran mayoría de niños se hacen las mismas preguntas, por esa razón me parece loable que en su literatura reconstruya un reino imaginario de las historias que leyó de niña a partir de sus propios cuestionamientos. Otros aspectos del éxito de sus libros, derivan de la estrecha relación que tienen con su editora, pero también con el trabajo que hace de manera paralela para promocionar sus novelas en escuelas y redes sociales.
Me parece que hacia allá tendría que transitar el mundo del autor. Fue una grata sorpresa poner el nombre de la escritora en el buscador y toparme con una buena cantidad de sitios que exhiben el nombre de sus libros, los ponen a la venta, los intercambian e incluso nos invitan a adentrarnos en su mundo fantástico a través de la literatura transmedia por medio de pequeños videos realizados en YouTube en los que la autora les presta voz. Ese es el camino que tendremos que recorrer escritores y editores en la actualidad, si tomamos en cuenta que las grandes editoriales y las librerías conforman, a partir de criterios mercadotécnicos y publicitarios muy específicos, grupos reducidos de autores en los que se invierte una fuerte promoción. Sin embargo existe un gran segmento editorial que tiene que ser partícipe de la promoción multimediática de su propio trabajo como lo muestra Laura Nieto.