El texto es un corazón que late en tabletas de arcilla, rollos de papiro, códex copiado sobre pergamino, libros o revistas impresos en papel, y ahora, reverberando dinámicamente en muchos tipos de pantallas y formatos, sin embargo, todos tienen o tuvieron métodos de catalogación y recuperación, de lo contrario no habrían bibliotecas.
Qué alegría escuchar desde Interlínea a dos compañeros de trabajo, oírlos es recordar los espacios que uno habitó, la biblioteca Ramón Villarreal de la UAM Xochimilco es habitable de varias maneras, quizá muchos no lo sepan, pero el fundador de la unidad que lleva el nombre de la biblioteca y es uno de los pilares del sistema modular, se lo expresó así al Doctor Carlos Ornelas en libro que tuvimos la fortuna de editar con el título “Hace 40 años, la fundación de la Universidad Autónoma Metropolitana”. Decía el doctor Villarreal: Se puso énfasis en evitar la segmentación entre materias, entre departamentos, entre divisiones, y queríamos que se presentara en términos más holísticos, el asunto de la salud y, en el fondo, el asunto de la sociedad en general. Vinculo esto a las ideas que en los años 50 habían nacido a partir del desarrollo de la teoría de sistemas, la cibernética, y todo ese esfuerzo que se hacía para obtener una visión más general, más integral de la problemática social. Y por esa integración holística tuvo que atravesar la biblioteca Dr. Ramón Villarreal, con una bella y funcional arquitectura para todo tipo de lectores.
En ese espacio coordinado por la Maestra Helia Terreros Madrigal, se ha formado mucha gente que ha permitido el tránsito y la convivencia con el entramado binario en el que también se guardan y recuperan los libros, basta entrar a la página para que uno note el esfuerzo que hizo posible y amable el acceso del lector al libro desde lugares remotos.
La pandemia desde luego aceleró esta reconfiguración, sin embargo, también hay una biblioteca material no binaria, bella, iluminada, viva, que también extrañamos muchos y a la que habremos de volver cuando las condiciones del entorno lo permitan. Hay dos citas de Mangel que parecieran que las escribió en una de las mesas de ese espacio maravilloso que cuenta también con una área de exposiciones a cargo de la Galería del Sur. La biblioteca ideal es de fácil acceso, ni escaleras altas ni explanadas resbaladizas, ni una confusa multiplicidad de puertas, ni guardias intimidantes deben interponerse entre el lector y los libros; la biblioteca ideal es tanto virtual como material, permite toda tecnología, todo recipiente, toda manifestación de texto. En suma, el corazón del Doctor Ramón Villarreal late en el sistema de bibliotecas de la Unidad Xochimilco.
