Me gustaría empezar con la pregunta de si ¿Alguna vez te habías puesto a pensar que la labor de un editor es también la de un creador? Un editor tiene que mirar y tomar en cuenta una parte económica, otra ideológica y una conceptual.  Pero el objetivo final, es enamorar al lector.  De esto, no se pueden nunca olvidar. Aspectos de los que nos habla Andrea Fuentes, editora, que recalca la importancia del editor como una persona multifacética. Este trabajo de seleccionar textos, imágenes, tipografías, texturas, papeles colores, tamaños para convertirlos en una creación, en una obra integral nueva, en la que todos los elementos dialoguen, donde se proponga un nuevo discurso y se dialogue en forma interdisciplinaria: ¡esa la labor de un editor!  

Desde que el libro existe como libro, los editores son el eje que los sustenta.  Cuidan y proponen lo que la editorial dirá a los lectores. Seleccionan los libros, las miradas, las temáticas, en fin: nos enamoran. La comunicación efectiva que es la base de las relaciones interpersonales que forman parte de nuestra vida y que miran hacia nuestra intimidad, la familiar, la social y la laboral.  Hablan de la escucha activa y el diálogo como sus elementos principales. Aspecto que los editores hacen a través de los libros. Un editor sabe esto y con base en esta comunicación, selecciona y nos ofrece un libro. ¿Te habías puesto a pensar que los editores nos acompañan y platican con nosotros en nuestras casas, en nuestra cama, en nuestras oficinas, en el transporte púbico, en los momentos más íntimos? 

La verdad es que mientras leemos no estamos solos.  No solo los personajes y el autor nos acompañan, sino toda una cadena de personas. Y es un editor quien lo conjuntó y lo hizo posible.