La puesta en página
Alejandro Tapia Mendoza
Tal vez uno de los presupuestos generales que tenemos cuando hablamos de edición y de lectura es que imaginamos que esos fenómenos conciernen esencialmente a los materiales escritos. Sin embargo podemos expandir nuestro horizonte cuando nos damos cuenta que las imágenes y los sonidos nos llevan también a una lectura del mundo y que su edición es crucial para compartir esa lectura con los demás, como sucede por ejemplo en el caso del cine, que produce una interpretación narrativa a través de la pantalla. Tal apertura nos hará ver a su vez que cuando hablamos de lectores ya no nos referimos exclusivamente a aquellos que confrontan las palabras en las páginas de un libro, sino también son lectores aquellos que disciernen los signos de las imágenes en movimiento, ya que ello involucra su habilidad lectora de la misma forma en que sucede ante las palabras.
Tal es el punto de partida de la entrevista de hoy con Yolanda Mercader, investigadora que se ha especializado en los procesos de lectura que están involucrados en el cine: cómo consideramos la gestualidad en el cine mudo, por ejemplo, cómo modificamos nuestro uso de la imagen y de lo audiovisual cuando aparece el cine sonoro, cómo nuestra formación como lectores nos permite transitar de una novela a su adaptación cinematográfica y viceversa, cómo el cine puede incidir también en la escritura. Los espectadores de cine pueden considerarse entonces como lectores, dirá Yolanda, y nos mostrará cómo ese juego puede hacerse presente especialmente en el ámbito de la adaptación, donde la lectura involucra no sólo al autor de un texto, sino ahora también al guionista (que reformula la obra en términos de imagen) y al director de un film, que a su vez interpreta también al guión. Y lo más interesante: cómo una obra cinematográfica puede motivar nuevas lecturas y nuevas ediciones de los libros de los que parten, haciendo que tanto autores como lectores se enriquezcan mutuamente.
La visión de Yolanda Mercader, de enorme interés para este programa enfocado en la lectura y la edición, se vierte sobre todo en las experiencias del cine mexicano, especialmente en los temas relativos a cómo son representadas las mujeres o los signos de nuestra nacionalidad tanto en palabras como en imágenes. Yolanda ha trabajado a su vez esa doble vertiente en las representaciones de lo mexicano en los lugares fronterizos, donde buena parte del imaginario nacional se ha forjado en esta interacción multinarrativa hecha a través de diversos lenguajes. En sus palabras advertiremos que nuestra capacidad de comprender y de advertir lo que somos parte tanto de lo que está escrito con palabras como de lo que está signado en las imágenes de nuestro cine, y es esta apertura de la noción de lectura lo que está en juego en el abordaje que ella propone.
Escuchándola nos preparamos a su vez para repensar la noción de edición en un sentido más profundo, ya que el cine y la literatura comparten esa condición de tener que recortar y ordenar el material simbólico para volverse significativas frente a los públicos, y cómo las adaptaciones que hay entre uno y otro formatos a lo que conducen es a una formación lectora más profunda del público, cuya habilidad interpretativa se enriquece a partir de esta interacción. Se trata pues de una propuesta que vale la pena atender.